Una madre condenada a devolver 140.000 libras por vender camisetas falsas de grupos de música en eBay, o a ir a la cárcel
Se ha ordenado a una mujer que devuelva las 140.000 libras que ganó vendiendo camisetas musicales falsas en Internet, de lo contrario se enfrenta a la cárcel.
Johanna Donnelly vendió mercancía sin licencia de grupos como Foo Fighters, The Stone Roses, The Stranglers, The Clash y Led Zeppelin y se benefició de 250.000 libras durante un periodo de tres años.
Donnelly utilizó su propio sitio web y su cuenta de eBay para vender el equipo a los fans utilizando las marcas registradas de las bandas.
Cuando los expertos en normas comerciales de Newport (Gales del Sur) analizaron algunas de las camisetas, descubrieron que no eran auténticas y que Donnelly había utilizado un nombre de empresa falso.
La madre respondió "sin comentarios" a todas las preguntas que se le formularon, según el Tribunal de la Corona de Cardiff. Posteriormente se declaró culpable de 20 delitos de venta e infracción de artículos de marca [vía Daily Mail].
Las cifras de ventas de PayPal de productos que infringían los derechos de autor ascendieron a 11.617,26 libras, mientras que otra cuenta tuvo ventas de 1.283,38 libras. La última venta registrada fue una que llevaba The Clash el 13 de mayo de 2019.
Los bienes disponibles recuperables ascendían a 141.655 libras, que el juez David Wynn Morgan ordenó devolver a Donnelly en el plazo de tres meses. Si no lo hace, cumplirá cinco meses de prisión.
Donnelly debe hacer 150 horas de trabajo no remunerado y 10 días en rehabilitación.
La noticia se produce después de que Big Hit Music denunciara el "uso no autorizado" de la marca de BTS antes del concierto "Yet To Come" de la banda en Busan el año pasado, en el que la discográfica dijo que tomaría medidas enérgicas contra la mercancía "falsificada".
El comunicado, escrito en coreano y en inglés, se publicó en las redes sociales oficiales de Big Hit Music el pasado mes de octubre. La discográfica reveló que había tomado "medidas estrictas contra las empresas que habían estado produciendo, vendiendo y distribuyendo repetidamente productos que infringían los derechos de retrato y marca de BTS ("productos que violan los derechos")".
Big Hit también anunció planes para "realizar inspecciones e investigaciones in situ de productos falsificados" en el lugar del concierto y sus alrededores.
