Nos suben el IVA de la cultura de un 8% a un 21%
Suponemos que ya lo sabréis porque ha sido la noticia estrella (lamentable) del fin de semana. El gobierno dejándose guiar no sabemos muy bien por qué clase de sentido común, ha decidido que es una estupenda idea subir el IVA en tres puntos.
Pero no contentos con esto han decidido que ciertos sectores que estaban en el tipo reducido como es el cine, la música, o las gafas pasan del 8% del IVA reducido actual a los 21% del tipo general que entrará en vigor en septiembre. Porque sí, el Gobierno ha descubierto hay mucho gafapasta que sólo las lleva por vicio y eso hay que cortarlo de raíz.
Si asistir a una cadena de multicines un fin de semana en Madrid a ver una proyección en 3D ya nos costaba la friolera de 11,5€ (8€ de entrada más 2,5€ de suplemento del 3D más 1€ de las gafas) ahora costará casi 13€. Así que adiós a las excursiones en familia y ni hablemos de las palomitas. Los productos del bar de los cines también suben.
Las ventas de Etta James suben un 378% después de su muerte
Suben las apuestas por Joaquin Phoenix para ser Batman
Habrá que romper el cerdito también para irse de concierto o de festival. Cojamos por ejemplo el BBK que ha acontencido este fin de semana. Si este año los abonos de tres días con derecho a acampada han costado 105€, el año que viene estarán en 118€ (más gastos). Siempre y cuando las promotoras no decidan asumir parte de la subida, claro.
Si ya había poca gente que compraba discos y dvds o blu-rays, ahora va a ser aun menos. Los formatos domésticos de música y cine tampoco se libran de la subida.
El precio del teatro también se va de madre. Si tomamos como referencia los 30 euros actuales que cuesta un asiento en platea para el Teatro Español fuera del día del espectador, a partir del 1 de septiembre estaremos en casi 34€. Por no hablar de esas entradas de musicales que ahora mismo rondan los 70€...
Esto llevará, casi seguro, al cierre de muchas salas de cine independientes, al fin de las pequeñas salas de teatro de corte más underground. Por su parte, seguramente los conciertos grandes y festivales multitudinarios tengan menos problemas ya que podrán asumir parte de la subida del precio, pero no podemos augurar lo mismo para la música de minorías y los artistas más desconocidos.
Vamos, que esto va a repercutir en un aumento de lo mainstream. Y más si tenemos en cuenta que otro tipo de eventos como el fútbol no ven aumentado su tipo de IVA. Es lo que tiene vivir en un país donde el presidente se jacta de leer, únicamente, diarios deportivos.
Así que, amigos, prácticamente podemos decir que la cultura en este país a muerto. Y como los servicios funerarios pasan de tener un 8% a un 21% de IVA, el entierro de la música, el cine y el teatro nos va a salir por un ojo de la cara.
Siempre nos quedará leer en formato papel, que es el único hobbie que nos dejan en tipo reducido.
