10 maneras en que Encanto habría sido mejor como serie de televisión

Las películas de animación de Disney han conseguido a menudo crear excelentes mezclas de narración mágica y profundas conexiones emocionales. Pero Encanto, la más reciente adición a la línea de películas de Disney, logra esa mezcla mejor que la mayoría de sus compañeros. Con una hermosa animación, un argumento de conflicto emocional y excelentes canciones para unirlo todo, Encanto realmente hechiza a los espectadores.

Aun así, nada es perfecto, y hay algunas cosas de Encanto que dejaron insatisfechos a los espectadores. La película tiene un final optimista y edificante a su manera, pero hay muchas preguntas sin respuesta y cuestiones sin abordar. Por ello, el argumento de Encanto habría sido más adecuado para una serie de televisión.

La trama de Encanto se centra en los Madrigal, una familia que vive en un asentamiento protegido por la magia en las montañas colombianas. El escenario es hermoso y hace honor a su herencia colombiana, pero tampoco se explica del todo. El Encanto se crea originalmente después de que la matriarca de la familia, Alma Madrigal, sea testigo de la muerte de su marido Pedro. Su dolor convoca el milagro familiar, que se manifiesta en forma de una vela mágica.

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La vela crea una protección en torno a Alma y a los demás habitantes del pueblo. Aunque el mensaje emocional de la historia -fuertemente anclado en la historia de violencia y desplazamiento de Colombia- es increíblemente impactante, no ofrece exactamente una explicación detallada sobre el funcionamiento del milagro familiar.

Encanto se ha ganado sus numerosos fans por la profundidad de su conflicto emocional y su trama. Pero hay algunos espectadores que consideran que la historia es un poco sosa y sin brillo. El viaje de Mirabel para descubrir la verdad tiene sus momentos emocionantes, sobre todo cuando está en la torre de Bruno. Sin embargo, se ha argumentado que en Encanto no pasa nada en realidad y que es bastante aburrida.

Aunque esto es, por supuesto, una cuestión de gustos, también es cierto que, como programa de televisión, la serie podría haber incluido algo más de acción clásica. Puede que el encanto de Encanto resida en sus temas de conflicto interno, pero las series de televisión tienen la ventaja de no tener que elegir y poder condimentar más las cosas.

Dejando a un lado la acción, una película como Encanto se centra definitivamente en los personajes. De hecho, uno de los puntos fuertes de Encantoes la individualidad de los personajes, desde sus dones únicos hasta su diseño y sus actores de voz. Pero por muy intrigante que sea cada miembro de la familia Madrigal, a muchos de ellos no se les da precisamente tiempo para brillar. Un ejemplo es Dolores. La prima de la protagonista, Mirabel, tiene el don de la superaudición.

Siempre parece estar al tanto de los secretos de los personajes y, sin embargo, nunca revela el hecho de que el Tío Bruno, del que se presume que ha abandonado el Encanto años atrás, en realidad sigue entre las paredes de la casa familiar. También siente algo por Mariano, el prometido de la hermana mayor de Mirabel, Isabela. Los dos comienzan una relación tentativa hacia el final de la película, pero es definitivamente algo que necesitaba ser explorado más.

Dolores no es el único personaje que no tiene la oportunidad de revelar su potencial. Muchos de los Madrigal tienen dones increíbles, pero sus poderes se reducen a puntos de la trama sin tener ninguna utilidad real en la historia. Algunos ejemplos son Camilo, cuyas habilidades para cambiar de forma se utilizan principalmente como alivio cómico, y Julieta, cuya habilidad para curar a la gente con una comida sólo se utiliza un puñado de veces en la historia.

Con una duración de menos de dos horas, Encanto se centra principalmente en el intento de Mirabel de salvar la magia familiar. El argumento revela mucho sobre Mirabel y su familia, pero no deja mucho tiempo para la resolución del conflicto. En el clímax, Mirabel y Abuela tienen un enfrentamiento que lleva a la destrucción de la casita y del Encanto.

Tras el desastre, Mirabel huye y Abuela la persigue. Las dos hacen las paces después de que Abuela revele sus verdaderas y desgarradoras motivaciones. Es un enfoque que tiene sentido teniendo en cuenta que se trata, al fin y al cabo, de una película de Disney. Pero tampoco es muy realista, y la profundidad del conflicto interno -que implica tanto a Abuela como a los demás miembros de la familia- se habría beneficiado de una mayor exploración.

Encanto aborda poderosos temas de trauma intergeneracional, ya que el propio dolor de Abuela la lleva a presionar a su familia para que alcance una forma asfixiante de perfección. Su desesperación por mantener a su familia a salvo la lleva a maltratar emocionalmente tanto a Bruno -despreciado por su don- como a Mirabel -considerada una marginada por no tenerlo-.

Alma se da cuenta de su error y se reconcilia con la familia. Su conversación con Mirabel ciertamente pone las cosas en perspectiva, pero muchos espectadores han argumentado que ella no tuvo mucho de un arco de redención. Los fans empatizan con su dolor por la pérdida de su marido, pero habría sido mejor que sus acciones fueran tratadas con algo más que una simple disculpa.

La crianza de Mirabel como marginado fue traumática, pero Tío Bruno puede haber tenido cosas aún peores. Su capacidad de ver el futuro hace que todos los que le rodean le vean como un heraldo de la desgracia. Su situación es tan mala que, cuando recibe una visión sobre Mirabel, opta por autoexiliarse sólo para salvarla de la misma experiencia.

El final de la historia muestra la reconciliación de Bruno con la familia. Parece que se reconcilia con su hermana Pepa, resentida por su boda arruinada. Pero al igual que el arco de redención de Abuela, el trauma de Bruno no se aborda más allá de eso. Todo se deja de lado demasiado rápido para que resulte satisfactorio. Los espectadores se quedan con la desagradable impresión de que se espera que Bruno perdone a su tóxica familia después de años de vivir entre sus muros.

Durante gran parte de la película, Mirabel desea desesperadamente tener un don mágico propio. Al final, demuestra que no lo necesita, ya que es su determinación la que realmente salva a los Madrigal. La película termina con la curación gradual de la familia mediante la reconstrucción de su hogar mágico. Todo el mundo, incluida la gente del pueblo, participa en el proceso. Al final, una vez que la casita está completa de nuevo, Mirabel toca el pomo de la puerta, para que la casa vuelva a cobrar vida y la magia de la familia regrese adecuadamente.

Este final no ha gustado a todo el mundo y también ha suscitado dudas sobre el verdadero don de Mirabel. El mensaje principal de la historia es que el poder de Mirabel mantiene unida a la familia, pero algunos fans señalan que esto podría haber llegado con una forma específica de magia. Una serie de televisión podría haber abordado finalmente ese misterio.

Los Madrigal son una familia muy interesante, pero los espectadores lamentablemente no llegan a conocerlos a todos. Aunque la muerte de Pedro crea el Encanto, también priva a la familia de una presencia poderosa y muy importante. Su muerte es la tragedia que marca a otras dos generaciones de Madrigal y reconoce la brutal realidad de la guerra.

Pero habría estado bien que hubiera hecho su aparición de alguna manera. Puede que Alma haya cometido muchos errores, pero se merecía un cierre, y ver a Pedro de nuevo, aunque sólo fuera para despedirse adecuadamente, podría haberla ayudado a ella y al resto de la familia a sanar.

Puede que Encanto tenga sus defectos, pero hace muchas otras cosas de forma maravillosa. Sus personajes, en su imperfecta pero sorprendente complejidad, se ganan fácilmente el corazón de los espectadores. Tanto los Madrigal como los Encanto tienen mucho más que ofrecer y sus fans estarían encantados de ver más de ellos. Una serie de televisión que celebrara sus aventuras como familia habría funcionado sin duda bien y habría hecho justicia a la familia mágica.