10 animes con menos personajes

Hay un montón de animes con innumerables personajes, desde aventuras shonen repletas de aliados y rivales hasta comedias de instituto con repartos coloridos. Pero, ¿qué pasa con el tipo de anime más raro que adopta el enfoque opuesto de "menos es más"?

Es difícil hacer una gran serie con un número reducido de personajes, porque eso significa que los personajes que aparecen tienen que ser aún más simpáticos e interesantes. Además, un elenco mínimo suele significar una historia mínima, ya que sólo con una gran variedad de personajes con diferentes dinámicas y objetivos puede arrancar una trama complicada.

Por un lado, el clásico de culto del anime Mushi-Shi tiene un montón de personajes. Se trata de una serie por episodios, por lo que el Mushishi viajero, Ginko, conoce a un nuevo personaje o comunidad y les ayuda en una situación que involucra al misterioso Mushi, de aspecto espiritual, en cada episodio.

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Pero, cuando se trata del impacto real de la serie, sería poco sincero pensar que tiene un gran reparto. Al fin y al cabo, es la historia de Ginko, y es esencial para la atmósfera melancólica de la serie el hecho de que nunca parece ser capaz de formar conexiones duraderas con nadie.

Técnicamente, Bakemonogatari cuenta con un reparto bastante decente, en el que el protagonista Araragi conoce a un número creciente de chicas extrañas y dudosamente humanas. Pero lo que le hace merecedor de un puesto en esta lista es el hecho de que no aparezca ningún humano aparte del reparto principal, ni en las calles de la metrópoli ni en el instituto. Los personajes de fondo simplemente no existen.

El resultado es extraño, ya que la serie parece estar ambientada en un mundo abandonado pero conservado. Es siniestro, y más que un poco espeluznante, por lo que encaja perfectamente con el tono general de la serie, que incluye reflexiones filosóficas mezcladas con payasadas románticas de harén.

Hay muchos animes que presentan a un pequeño grupo de chicas de instituto haciendo el tonto en una sala de fiestas de la que raramente salen. Sin embargo, normalmente pueden salir, y eso es lo que hace que School-Live sea una visión tan morbosa del género. En un oscuro giro, la protagonista Yuki sólo cree que se queda a dormir en la escuela voluntariamente. En realidad, un apocalipsis zombi a gran escala la ha obligado a ella y a sus amigos a atrincherarse como los últimos supervivientes de su escuela.

Por ello, en School-Live no aparecen todos los personajes secundarios habituales . No hay profesores, ni padres o hermanos, ni otros compañeros de clase. Sólo el Club de Vida Escolar y un montón de muertos vivientes.

Las series con sólo dos o tres personajes tienden a ser más dramáticas. Estar tan cerca de una sola persona genera unos vínculos emocionales increíblemente fuertes, y una serie en la que un personaje pasa mucho tiempo solo tiende a estar llena de autorreflexión.

Pero los repartos minimalistas también pueden dar lugar a una comedia eficaz. Tonari no Seki-Kun: The Master of Killing Time es una serie de comedia de corta duración con un argumento increíblemente sencillo. La estudiante de secundaria Rumi Yokoi se distrae constantemente con las travesuras de su vecino de asiento en la clase, lo que le permite dar rienda suelta a sus fantasías.

Un verano, una joven conoce a un extraño chico con una máscara en la cara. A lo largo de los años, siguen encontrándose y su relación se profundiza. Sin embargo, el chico le advierte a la chica que nunca deben tocarse, o él desaparecerá.

Este es el argumento de Hotarubi no Mori e, un romance que es simplemente la historia de estos dos personajes. Está casi garantizado que dejará a su público con los ojos llorosos, y su conmovedora historia de relaciones entre yokai y humanos la convierten en el visionado perfecto para los fans de Spirited Away o El libro de los amigos de Natsume.

A lo largo de los años, el estudio de novelas visuales Key ha dado a la comunidad del anime algunas de sus series románticas más emblemáticas, como Clannad, Kanon y Air. Pero, mientras que estas se basan en juegos en los que el jugador podía tener un romance con muchos personajes, Planetarian se centra en una sola chica.

Esa chica es Yumemi, una guía robótica de un planetario en ruinas en un mundo moribundo. Conoce a un carroñero, Kuzuya, que acaba aceptando ayudarla a arreglar el planetario, y lo que sigue es un romance tan hermoso como cualquiera de las historias más conocidas de Key.

Los aficionados probablemente conozcan mejor la obra de Yoshitaka Amano por sus hermosas y delicadas ilustraciones de Final Fantasy. Pero uno de los logros artísticos menos conocidos de Amano es la película de 1985 Angel's Egg, una obra maestra hermosa y surrealista. Con sólo dos personajes -una joven que lleva un huevo y un hombre que lleva una cruz-, el foco de atención de esta película se centra en los extraños y fascinantes paisajes por los que ambos deambulan. Para los aficionados al anime que buscan algo fuera de lo común, es una película imprescindible.

Girls' Last Tour es un anime realmente único que combina las payasadas moe con un escenario postapocalíptico. Los supervivientes Chito y Yuuri luchan constantemente por encontrar comida y refugio, pero la serie deja claro que lo único que necesitan es el uno al otro.

En la primera mitad de la serie aparecen un par de personajes menores con los que Chito y Yuuri viajan brevemente, pero esto sólo hace que parezca aún más desolador cuando, al llegar el final de la serie, queda claro que realmente son los dos últimos que quedan.

Muchas de las obras de Makoto Shinkai tienen pocos personajes. Tanto 5 centímetros por segundo como El jardín de las palabras se centran en dos personajes principales, y los secundarios sólo tienen papeles muy secundarios. Por su parte, Voces de una estrella lejana, un romance de ciencia ficción, no tiene ningún personaje secundario.

Pero es Ella y su gato, la primera película de Shinkai, la que tiene el reparto más minimalista de toda su obra. Este cortometraje está protagonizado por un solo ser humano, una mujer joven, que explora su vida con su gato.

"No estoy sola", dice Rin, la protagonista del cortometraje y vídeo musical Shelter, a pesar de estar literalmente sola. El público la ve viajar por los magníficos paisajes de fantasía que ha creado con su tableta, mientras afloran lentamente los dolorosos recuerdos de cómo y por qué ha acabado en este extraño mundo.

A pesar de durar solo seis minutos, Shelter causó un gran revuelo cuando se estrenó en 2016. Como vídeo musical para una canción de Porter Robinson y Madeon, capturó la imaginación de los fans japoneses y occidentales con su impresionante animación y su desgarradora historia.