Un ex empleado de Infinity Ward recuerda el dramático despido de los responsables de 'Call Of Duty'

Un desarrollador que estuvo en primera línea del infame despido de los creadores de Call Of Duty Jason West y Vince Zampella de Infinity Ward en 2009 ha revelado lo que ocurrió después.

Tras crear el Call Of Duty original en 2003 y llevarlo a nuevas cotas con Call Of Duty 4: Modern Warfare en 2007, tanto West como Zampella fueron despedidos abruptamente de Infinity Ward por la empresa matriz Activision en 2009.

Al parecer, ambos fueron despedidos por "insubordinación" y fundaron Respawn Entertainment con el respaldo de Electronic Arts. Alrededor del 40% del equipo de Infinity Ward abandonó el estudio poco después, a pesar del inminente lanzamiento de Call Of Duty: Modern Warfare 3, y la mayoría se unió a Respawn para trabajar en títulos como Titanfall y Apex Legends.

Ahora, el ex diseñador de Infinity Ward Paul Sandler ha hablado sobre lo que ocurrió en el estudio tras el despido.

En un artículo publicado en LinkedIn titulado "That day when Activision fired Jason and Vince" (El día en que Activision despidió a Jason y Vince), Sandler reveló que el equipo de Infinity Ward se quedó "atónito" al conocer la noticia del incidente, y que los guardias de seguridad vigilaron las puertas para asegurarse de que ni West ni Zampella pudieran volver a las oficinas.

"El hecho de que nuestros respetados jefes de estudio, nuestros líderes, hubieran sido despedidos de forma tan repentina y a sangre fría provocó en todo el equipo un sentimiento colectivo de rabia y una profunda sensación de injusticia".

"Jason y Vince habían sido fundamentales para fomentar uno de los equipos de desarrollo con más talento y más aclamados por la crítica de la industria, que creó la marca y franquicia de videojuegos más popular y exitosa de la historia de los videojuegos", continuó, y muchos desarrolladores hablaron de renunciar en solidaridad.

Al parecer, los responsables de Activision intentaron acabar con esta situación ofreciendo al equipo un aumento salarial del 50%, además de las bonificaciones por la distribución de Call Of Duty: Modern Warfare 2.

"En todo caso, la mayor parte del equipo se sentía aún más disgustada", dijo Sandler. "El ejecutivo volvió a hablar: 'Mira, lo entiendo. Sé que es una situación difícil. Pero, coge el dinero y supéralo'".

"Al día siguiente y durante las semanas siguientes, los miembros del equipo de Infinity Ward empezaron a dimitir uno a uno", escribió.

Al explicar los motivos que le llevaron a escribir el artículo, Sandler explicó: "Me he inspirado para empezar a escribir artículos breves sobre mi trayectoria de más de 20 años en el desarrollo de videojuegos. Sin ningún orden en particular, empezando por el acontecimiento más tumultuoso y volátil que recuerdo".

En otras noticias, Capcom ha publicado una encuesta para sondear el interés por una serie de remakes y secuelas de sus franquicias icónicas.