La audiencia de 'Diablo 4' en Twitch ha caído significativamente en sólo dos meses
Las audiencias de Diablo 4 en Twitch han descendido rápidamente en los dos meses transcurridos desde su lanzamiento en PC y consolas, registrando tan solo 13.000 espectadores el 7 de agosto.
La tendencia, de la que se dio cuenta el usuario de Reddit UsualInitial y que luego corroboró PCGamesN, ha estado vigente desde mediados de junio. El lanzamiento del acceso anticipado de Diablo 4 registró un pico de 937.361 espectadores en el servicio de streaming y volvió a subir hasta los 686.936 espectadores el día de su lanzamiento oficial.
Sin embargo, en las dos últimas semanas, el número medio de espectadores del juego ha descendido casi un 40%, y el de emisores, aproximadamente un 22%. Season Of The Malignant está pensado para que los jugadores jueguen hasta octubre, pero la respuesta al parche de pretemporada 1.1.0 fue vitriólica.
Los jugadores se quejaron de que ya no eran capaces de soportar Santuario gracias a los nerfs a la supervivencia, la producción de daño y la disminución específica en las clases Bárbaro y Hechicero.
Blizzard Entertainment lo ha reconocido, y el parche 1.1.1 corrige las cosas que no gustaron a la comunidad en la última actualización. Por ejemplo, los hechiceros recibirán un radio de bola de fuego mayor y un aumento del daño de Rayo en cadena. Los bárbaros se beneficiarán de una mayor tasa de generación de Furia para todas las habilidades básicas.
Esto debería permitir a los jugadores hacerse una idea de lo efectivas que serán sus builds en el contenido final de Season Of The Malignant, que podría haber sido un factor que disuadiera a la gente de probarlo.
En un principio, Diablo 4 fue todo un éxito para Blizzard Entertainment. En la reseña de cuatro estrellas de NME, destacaban sus clases y habilidades, así como la presencia de Lilith en el juego, que le valió el título de una de las "villanas más atractivas" de la serie.
En otras noticias de videojuegos, el desarrollador Acid Wizard Studio decidió cerrar tras anunciar que era incapaz de "crear un entorno de trabajo que no fuera destructivo para nuestra vida personal".
