En "Los espías", el mandaloriano traza una hoja de ruta para el futuro de Star Wars

Esta crítica contiene algunos spoilers de la temporada 3, episodio 7 de The Mandalorian"Capítulo 23: Los espías".

Los dos últimos meses de The Mandalorian han sido una de las temporadas televisivas más extrañas que se recuerdan. Los episodios han oscilado entre aventuras ligeras de la semana, inmersiones profundas en la sabiduría popular de Star Wars, tangentes centradas en personajes secundarios e historias detectivescas cargadas de cameos divisivos. Pero en el "Capítulo 23: Los espías" de esta semana, la atención se centra no sólo en hacer avanzar la trama principal de The Mandalorian, sino también en sentar las bases para la(s) próxima(s) serie(s) y película(s) que cerrarán todo este Mando-verso y crearán un puente entre la trilogía original y la secuela. Pero a falta de un episodio, no puedo evitar sentir que esta temporada esconde un secreto mayor bajo el texto.

El episodio arranca con Elia Kane (Katy M. O'Brian) abriéndose paso por las calles de Coruscant, empapadas de neón y lluvia, para entregar un mensaje al Moff Gideon (Giancarlo Esposito), estableciendo una vez más paralelismos con Blade Runner. (La densidad de la megalópolis en esta escena inicial es impresionante, y nos hace preguntarnos por qué puede parecer tan buena en este episodio y tan plana y poco interesante en otros.

Skull & Bones' anuncia beta abierta y hoja de ruta para el primer año

World Of Warcraft' confirma la fecha de lanzamiento de 'War Within' y la hoja de ruta para 2024

Gideon transmite al Consejo de las Sombras la noticia de que Din (Pedro Pascal) y Bo-Katan (Katee Sackhoff) están uniendo a las distintas tribus mandalorianas, lo cual es un poco precipitado para un grupo de malvados que quieren resucitar en secreto al Imperio y al Emperador, pero Star Wars nunca ha sido una saga de sutilezas.

Esta escena nos arroja un montón de información y referencias, incluyendo a Brendol Hux (Brian Gleeson), el padre de Armitage Hux, que jugó un papel importante en la trilogía de la secuela. Se habla de Thrawn, que ahora sabemos que será interpretado por Lars Mikkelsen en Ahsoka y que posiblemente aparezca durante el final de la próxima semana. También se menciona el Proyecto Nigromante, los experimentos que conducen directamente a los clones de Palpatine de El despertar de Skywalker. Está claro que esta serie está haciendo todo lo posible por crear un puente de continuidad entre todas las entregas de Star Wars de la era Disney, incluso aquellas de las que personalmente preferiría olvidarme.

De vuelta a Navarro, el IG-11 se ha convertido finalmente en el IG-12, que ahora es menos una máquina de matar y más un mech larguirucho con una pequeña cabina perfecta para nuestro amigo Grogu. Tras otro tenso enfrentamiento con el mecánico de Anzellan, (para ser justos, si yo fuera un bicho más pequeño que Grogu, tampoco me fiaría de él). Baby Yoda se sube a su nuevo Gundam e inmediatamente empieza a comportarse como la amenaza que tanto nos ha gustado en los últimos años.

Robando comida, destrozando productos, chocando contra los muebles como un borracho después de la última llamada y golpeando los botones electrónicos de "sí" y "no" con temerario abandono, Grogu demuestra que es el recipiente definitivo para el caos en la galaxia. Y sí, la ética moral que hay detrás de pilotar el cadáver de un droide que una vez fue inteligente es un poco irregular si lo piensas, así que mejor no hacerlo.

Aunque me encantan las travesuras de Grogu en este episodio, cada vez tengo más claro que su papel en esta temporada no es el que se había planeado originalmente. Cuando se va a entrenar con Luke al final de la segunda temporada, da la sensación de que iba a tardar mucho más en reunirse con Mando. En algún momento, parece como si se hubiera tomado la decisión de reunirlos antes en El libro de Boba Fett, y lo que nos queda es una temporada entera en la que Grogu sólo está de paso y no es crucial para ninguna trama importante. Si mi teoría es correcta, esto no es más que otro ejemplo de que la Guerra de las Gal axias moderna tiene miedo de arriesgarse y contar historias fuera del molde conocido.

Volviendo al episodio propiamente dicho, Bo-Katan convence al grupo para que se dirijan a Mandalore y recuperen su planeta natal. Lo que más me gusta de esta escena es que, al fondo, se ve un trozo gigante de carne siendo asado, y se parece a uno de los monstruos bebé pájaro que capturaron hace unos episodios, lo que hace que esta tripulación parezca más sádica de lo que nunca fue el Imperio.

Mientras el equipo se dirige al planeta, la Armera (Emily Swallow) encuentra una conveniente excusa para separarse de ellos poco antes de que caigan en la trampa de Moff Gideon. Entre este momento, la iconografía de su casco, que refleja la de Darth Maul y su Guardia de la Muerte, y el nombre del episodio, que es literalmente "Los espías", lo más seguro es que la semana que viene se revele que es una rata que trabaja para Gideon.

La batalla final introduce nuevos soldados de asalto con mochilas propulsoras y armaduras Beskar, así como el nuevo y genial atuendo mandaloriano de Moff Gideon. Paz Vizsla (Jon Favreau) se sacrifica para que el resto tenga más tiempo para escapar. Aunque acaba con todos los soldados normales, no es rival para el nuevo trío de Guardias Pretorianos de Gideon, los guardaespaldas de élite vestidos de rojo que aparecen en toda la trilogía de secuelas, incluida la excelente batalla de Los últimos Jedi contra Rey y Kylo. Parece que queda mucho por resolver cuando solo queda un episodio, y tendré curiosidad por ver cómo de satisfactoria resulta la próxima semana.

La emisión del "Capítulo 23: Los espías" en la semana de la Star Wars Celebration 2023 parece muy oportuna. Con el primer vistazo al Thrawn de acción real en el tráiler de Ahsoka, y la noticia de que Dave Filoni dirigirá una próxima película que actuará como culminación de las historias que ha estado contando a través de The Clone Wars, Rebels y estas diversas series de Disney+, la hoja de ruta del Mando-verso nunca ha estado tan clara. Queda por ver si hay suficiente gasolina en el depósito para llegar de una pieza.