El desconocido reparto de One Piece es una bendición y una maldición
La semana pasada, Netflix estrenó su esperada adaptación de acción real de One Piece, de Eiichiro Oda. En general, la acogida ha sido bastante positiva, aunque no es ni mucho menos una serie perfecta. Dicho esto, decir que la serie está muy bien es un elogio, teniendo en cuenta no sólo el historial de adaptaciones de acción real de Netflix y la enorme escala y la locura necesaria para adaptar One Piece, sino también porque había muchas incógnitas sobre la propia serie. Netflix mantuvo en secreto gran parte de la producción, hasta el punto de que la mayoría del reparto era relativamente desconocido antes del estreno. Para una franquicia tan importante, cabría esperar que al menos una gran estrella estuviera vinculada a la serie, pero para muchos de los actores que participan en One Piece, este es el mayor proyecto en el que han participado.
En una época en la que la mayoría de los estudios creen que una producción necesita una gran celebridad para ser comercialmente viable, agradezco que, al menos en apariencia, One Piece intentara reunir a su reparto basándose en quién es el mejor para el papel y no en quién sería la opción más popular. A excepción de un actor, nunca había oído hablar de ninguno de los miembros del reparto. Sin embargo, esta decisión es a la vez una bendición y una maldición para la serie. Una producción de esta envergadura permite que se abran muchas puertas para estos actores, pero también puede demostrar que algunos miembros del reparto aún no están preparados para el prime time.
Intentar ponerse en la piel de algunos de los personajes más icónicos de todo el anime es difícil. La realidad es que un fan va a tener expectativas independientemente de cómo Netflix haya decidido enfocar One Piece. A menos que vayas a la serie completamente a ciegas, lo que estoy seguro que es cierto para muchas personas que están viendo la adaptación de Netflix, no importa lo que hagas, vas a tener algún tipo de expectativas. Es literalmente imposible no tenerlas. Hay percepciones públicas de cómo se supone que deben ser estos personajes, y desviarse de eso es una gran manera de ganarse reacciones negativas. Puedes reunir a un reparto, vestirlos como sus homólogos y hacer que hagan las mismas cosas que esos personajes, pero eso no significa que un actor pueda encarnarlos de forma convincente a menos que realmente capte la esencia de lo que se supone que debe interpretar.
Todos los actores y miembros del reparto de La maldición
El tráiler de One Piece trae de vuelta al reparto japonés de la serie de Netflix
En la universidad me especialicé en teatro, y una de las cosas más importantes que aprendí a la hora de encarnar un personaje fue a hacer tuyo ese personaje. Puede parecer sencillo, pero es mucho más complejo de lo que se piensa. Aportas tus propias experiencias vitales a un papel, y tu pasado, presente y futuro pueden influir en tu percepción del personaje y en su forma de actuar. La mejor manera de explicarlo es pensar en un personaje como un molde en el que se vierten las propias interpretaciones. Si intentas llenar ese molde con la interpretación de otro actor y tratas de replicarla, no harás una buena interpretación simplemente porque no sabes cómo llenó ese actor su molde. Ves el resultado, pero no entiendes el método y la práctica que se emplearon para crearlo. Las mejores interpretaciones son las que aportan su auténtico yo al papel, pero intentan encarnar activamente los ideales de los personajes.
Creo que el actor que mejor representa esta mentalidad es Taz Skylar, que interpreta a Sanji. Sanji es un personaje difícil de representar. Es un tipo con la cabeza fría, pero rápidamente puede volverse increíblemente apasionado a la hora de proteger a sus amigos y sus sueños. También está loco por las chicas, hasta el punto de que sus travesuras lascivas pueden resultar irritantes, y su amarga rivalidad con Zoro es más bien cómica y no evoluciona de forma significativa.
En manos inferiores, uno de esos rasgos habría destacado sobre el resto, dando lugar a una interpretación muy desigual que podría haber resultado irritante. Pero Skylar hace un trabajo notable al intentar que Sanji parezca un ser humano de verdad y no sólo una caricatura. Hace que todos esos elementos formen parte de Sanji, pero sin exagerar ninguno de ellos. Lo convierte en una persona tridimensional, algo que es difícil de conseguir tan pronto. Y como ha hecho un trabajo tan bueno, estoy atento a lo que haga Taz Skylar. Fue un riesgo contratar a alguien tan desconocido como él, pero me gustaría pensar que mereció la pena.
Y Skylar no es la única persona que está ahora en mi radar por su actuación en One Piece. El papel de Jeff Ward como el payaso Buggy captó exactamente lo que hace al personaje tan adorablemente patético. Y, a pesar de aparecer sólo en unas pocas escenas, Steven Ward acaparó la atención de todos en su papel de Hawkeye Mihawk. Además, como no se ha elegido a una gran celebridad para el papel, siento que le presto más atención. ¿Has visto alguna vez una película en la que un actor famoso hace un cameo sorpresa y sólo puedes verlo como él mismo y no como el personaje que interpreta? Eso distrae, pero yo no puedo distraerme con papeles interpretados por actores que no conozco.
Sin embargo, lo que puede distraerme es que determinadas interpretaciones no encajen necesariamente. Sé que he dicho que un actor debe aportar su propia interpretación al papel y ser auténtico consigo mismo, pero hay un límite. Tienes que ser fiel a ti mismo, pero también tienes que ser fiel al personaje, y creo que parte del reparto de One Piece está mal interpretado. En el caso de los papeles pequeños, al final no importa. Si el personaje no influye en la trama central, se pueden tener interpretaciones más débiles, siempre y cuando no obstaculicen la historia principal. Por ejemplo, no creo que a nadie le importe realmente que la interpretación de Genzo por parte de Grant Ross carezca de ese severo encanto paternal que le hizo ganarse el cariño de los lectores en el manga. Después de todo, sólo tiene un puñado de líneas en esta temporada y su existencia sólo sirve para mejorar la historia de Nami. No, el problema viene cuando el personaje es mucho más significativo, y la mayor queja que tengo con el reparto de One Piece es con el actor de Zoro, Mackenyu.
La versión de Mackenyu sobre Zoro no me gusta. Aunque se supone que su personaje es un malvado aún por determinar, resulta ser otro solitario sarcástico que tarda toda una temporada en descubrir que le gusta la gente con la que navega. Aunque la calidad de la escritura es sin duda un elemento que ha influido en mi percepción del personaje, gran parte de esto recae en las capacidades de Mackenyu como actor. Aunque ha participado en muchas películas en Japón, la calidad de sus interpretaciones ha variado mucho y sus papeles en inglés han sido muy escasos. Como una de las pocas personas que vio Knights of the Zodiac a principios de este año, puedo afirmar con seguridad que, por el momento, es bastante inexpresivo y no puede expresar emociones de forma convincente. Necesita más tiempo en el horno antes de que pueda ser realmente notable, por lo que elegirlo para un papel importante realmente disminuye mi entusiasmo por las escenas en las que aparece.
Dado que muchos de los actores no han participado en demasiados papeles antes de One Piece, esa falta de experiencia también está presente en la mayoría de los actores secundarios, como Morgan Davies, de Koby, o Aidan Scott, de Helmeppo. One Piece es para muchos de ellos su gran oportunidad y, por eso, algunos de ellos simplemente no tienen suficiente experiencia para ofrecer una actuación estelar. Al fin y al cabo, la práctica hace al maestro, y contar con un elenco de actores en su mayoría desconocidos que aún no han tenido su gran oportunidad significa que no han tenido tantas oportunidades de perfeccionar su arte.
Pero creo que, en general, One Piece se beneficia de tener un reparto relativamente desconocido. La serie ha permitido a estos actores llamar la atención del gran público, e incluso si algunas de las actuaciones no son precisamente estelares, tienen mucho espacio para crecer y es de esperar que puedan encontrarse en más proyectos para ayudar a mejorar su arte. Después de todo, una situación similar ocurrió con Stranger Things. Básicamente, todos los actores infantiles de la serie tenían muy pocos papeles antes de la serie, y ahora son bastante conocidos y han sido elegidos para proyectos que les permiten mostrar mejor sus capacidades.
Sí, si estás familiarizado con el manga, algunos de estos personajes, que contaban con maravillosas interpretaciones a sus espaldas, desaparecen de la faz de la Tierra durante varios arcos, así que podría pasar un tiempo hasta que volvamos a ver a Buggy o Mihawk en algún papel destacado, pero creo que la serie sólo puede mejorar si se mantiene a actores relativamente desconocidos para que tengan una plataforma en la que presentarse al público. Y en el caso de las interpretaciones que no son precisamente estelares, esperemos que con más tiempo para habitar el personaje puedan encontrar un buen ritmo para hacerlo suyo. Al fin y al cabo, no todas las series de televisión excelentes fueron perfectas en su primera temporada. El tiempo dirá si este elenco será capaz de crecer o no como actores, pero soy optimista de que la actuación sólo mejorará si se ordenan futuras temporadas.
Sobre el autor
Jesse Lab Jesse Lab es un escritor independiente para The Escapist y ha sido parte del sitio desde 2019. Actualmente escribe la columna Frame Jump, donde mira y analiza los principales lanzamientos de anime. También escribe para el sitio web de cine Flixist.com. Jesse ha sido un gamer desde que jugó por primera vez a Pokémon Snap en la N64 y te hablará en cualquier momento sobre RPG, plataformas, terror y juegos de acción. Tampoco para de hablar de las últimas películas y animes, así que no dudes en pedirle recomendaciones sobre lo que se estrena en los cines y los nuevos animes que se emiten cada temporada. 
