Crítica de Melancolía de Lars Von Trier "el melancólico"

¿LA VERSIÓN MAINSTREAM DEL DANÉS?


Mañana, viernes 4 de noviembre llega a nuestras pantallas "Melancolía", la última película de Lars Von Trier y que tanto ha dado que hablar, más por el contexto que la rodeó en Cannes que por su contenido. Pero dejemos de lado el suceso que le llevó a ser Lars Von Trier "El Silencioso" y centrémonos en la película.

Siguiendo la estela de "Anticristo", Lars inicia la cinta con un epílogo a cámara lenta, cargado de imágenes oníricas que además se recogen durante la cinta: algunas imágenes mentales y sentimientos de las protagonistas son mostrados de antemano. Y a ritmo de "Tristán e Isolda" se inicia al que podría considerarse como la película más bonita del cineasta.

"Melancolía" podría considerarse la versión más mainstream del director (todo lo comercial que pueda ser el cine de este hombre). Digo mainstream porque es una película mucho más fácil de ver que "Rompiendo las olas" o "Dogville", por ejemplo. "Melancolía" no consigue esa implicación emocional tan profunda del espectador. Sí, engancha y atrapa, te mete en la historia, pero no llega a generar desazón existencial.

No es lo mejor de Lars Von Trier, desde luego, pero mejora su película anterior. Pero no es provocadora, ni desagradable, ni te deja todo el día meditando sobre la nimiedad del ser. No, en ese sentido es mucho más simple. La película es la confrontación de los caracteres de dos hermanas: una "normal", que disfruta de la vida y agradece el presente. La otra depresiva y melancólica, a la que la llegada del fin del mundo no le provoca ansiedad ni desasosiego. El fin del mundo siempre será mejor.

Von Trier se pone a si mismo en el papel de Kirsten Dunst, la melancólica. El grueso de los mortales, nos identificamos con Charlotte Gainsbourg, la que no quiere morir porque disfruta de la vida. Como siempre cuándo hablamos de una película del danés, las interpretaciones son brillantes. Kirsten Dunst ya se ha dicho mil veces que está maravillosa, Charlotte Gainsbourg simplemente lo es.

Probablemente "Melancolía" guste a aquellos a los que las películas del director les parezcan atractivas, pero con reservas. Decepcionará a los acólitos, porque es una versión light de sus historias provocadoras. Y los detractores no les gustará, pero asistirán a un repertorio de bellas imágenes que esperemos sepan apreciar.

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