Nintendo Switch - Análisis del modelo OLED

No soy un fanático de Nintendo en sí, pero sí de la Switch. Tanto en términos de forma como de función, la Switch es mi consola favorita -más aún, mi posesión material favorita- tal vezde todos los tiempos. Como mínimo, es la primera consola que rivaliza con la Game Boy original, la PlayStation 2 y la Xbox 360 como principales aspirantes a mi corazón de jugador. La Switch es versátil, tiene un aspecto icónico y alberga algunos de mis juegos favoritos de los últimos cuatro años.

Como una de las características de la Switch que más me gustan es que es a la vez una consola portátil y una consola doméstica, nunca tuve interés en su segunda iteración, la Switch Lite. Para los jugadores que solo necesitaban una versión portátil con descuento, tenía mucho sentido. Pero la Switch fue la primera compra que hice tras cobrar mi primer sueldo como escritor de juegos, y no estaba en el mercado para una segunda Switch.

Pero ahora ha llegado a las tiendas la Nintendo Switch - Modelo OLED (en adelante, Switch OLED), y ofrece algo ligeramente diferente. Tiene todo lo que me gustaba de la Switch original, excepto que tiene una pantalla más grande y mejor, un dock con algo más de utilidad, el doble de almacenamiento interno y un soporte mejorado.

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No sé exactamente cómo enfocar esta reseña. Es injusto por mi parte decir si deberías comprar la Switch OLED, porque no he tenido que tomar esa decisión yo mismo, ya que Nintendo me envió una unidad de revisión. No puedo decir si habría comprado una Switch OLED si ese dinero saliera de mi propio bolsillo porque no tuve (ni tengo) que considerar siquiera esa posibilidad. Claro que puedo hacer una valoración del hardware, pero en realidad es tan sencillo como decir que la Switch OLED es objetivamente mejor que el modelo original en todos los sentidos.

Lo más destacado de la Switch OLED es, obviamente, su pantalla. La pantalla OLED supera en una pulgada de diagonal a la pantalla LCD de la Switch original. Luego está la diferencia entre LCD y OLED. Mientras que la LCD (pantalla de cristal líquido) utiliza la retroiluminación para inyectar los colores y la luz en los ojos, la OLED (diodo orgánico emisor de luz) no necesita retroiluminación. La principal diferencia entre ambos es que el OLED puede conseguir colores más vivos y negros mucho más oscuros y puros. Esto se debe a que la OLED no tiene retroiluminación, lo que crea una "fuga de luz" en la que la luz de las partes más brillantes de la pantalla se filtra en las partes más oscuras, a diferencia de la LCD, que es, francamente, una tecnología relativamente antigua en este momento.

Es difícil mostrar la diferencia que supone la pantalla OLED a la hora de jugar con ella, especialmente en un fotograma tomado con un smartphone, pero el impacto es sorprendente en persona y en movimiento. La imagen que produce la pantalla OLED de Switch es vibrante y está llena de un contraste más natural. Sin embargo, más impactante que la calidad de la imagen es el tamaño de la pantalla. Aunque una pulgada no parezca mucho, el hecho de que la pantalla abarque prácticamente toda la anchura de tus manos cuando juegas en modo manual es más fácil para los ojos, especialmente para un veterano como yo. (Por cierto, tengo 35 años, una edad decrépita para los jugadores).

Aun así, es un poco decepcionante que la única diferencia entre la pantalla de la Switch original y la Switch OLED sea el material que utilizan las pantallas para emitir luz. Ambas pantallas siguen utilizando una resolución de 720p y una tasa de refresco de 60 Hz. Eso significa que, aunque el brillo y el tamaño de la OLED son claramente superiores a la envejecida pantalla LCD del modelo original, vas a seguir teniendo esos notables bordes dentados en ciertos juegos cuando juegues en modo portátil. No me importa lo que otros hayan dicho sobre que 720p está bien para los juegos de mano y que una densidad de píxeles de 209 PPI es suficiente; los bordes dentados siguen siendo bastante prominentes en ciertos títulos como The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Por supuesto, hay razones para una pantalla de 720p sobre una de 1080p, especialmente cuando se trata de la duración de la batería. Solo digo que la resolución de 720p (cuando los juegos de Switch consiguen llegar a ese punto de referencia) sigue mostrando su edad, solo que en una pantalla más brillante, más grande y más fácil de ver.

Pero la pantalla no es la única mejora que presenta la Switch OLED con respecto a la OG Switch en el modo portátil. El audio que emiten los altavoces de la Switch OLED es alto y nítido, y realmente añade mucho más disfrute e inmersión a la experiencia portátil en comparación con el audio procedente de la Switch básica, que siempre sonaba apagado y decepcionante. Dado que suelo jugar en modo portátil si estoy en público y no soy una completa basura humana, casi siempre uso auriculares o silencio mi consola. Pero si estoy en casa, reclinado en la cama o en el sofá con una Switch y puedo aprovechar los altavoces, las mejoras en el audio son notables.

Dicho esto, la toma de auriculares sigue estando en la parte superior de la consola. A la mayoría de la gente probablemente no le importará, pero yo soy un bicho raro y me gusta tener el conector de auriculares en la parte inferior de mi dispositivo. No es un problema tan grande ahora que la Switch es compatible con dispositivos Bluetooth, pero me sigue gustando usar mis auriculares con cable a veces y odio tener un cable colgando de la parte superior de la consola. Es una queja muy pequeña y específica, pero no deja de ser una queja.

La otra gran mejora del hardware de la Switch en el modelo OLED es su soporte. Personalmente, estoy contento de poder volver a jugar en modo sobremesa, teniendo en cuenta que el endeble pie de apoyo de mi Switch original se rompió en un aeropuerto cualquiera sin que me diera cuenta hace años, y desde entonces no he vuelto a jugar en modo sobremesa. Lo mejor del nuevo soporte es que no solo es mucho más robusto y seguro que el de la Switch original, sino que también es ajustable. En otras palabras, puedes establecer diferentes ángulos de visión para la Switch OLED en el modo de sobremesa en función de la situación en la que te encuentres, lo que supone una enorme mejora de la calidad de vida. Supongo que el modo de sobremesa es probablemente la forma menos popular de usar la Switch, pero el pie de apoyo de la Switch OLED podría cambiar eso: es mucho mejor.

El único punto en el que la Switch OLED decepciona ligeramente como actualización es en su almacenamiento interno. Sus 64 GB duplican los lamentables 32 GB de la Switch original, pero sigue siendo demasiado fácil quedarse sin espacio y tener que recurrir a una microSD adicional. Es cierto que comprar almacenamiento adicional es mucho más barato para la Switch que para una Xbox Series X o una PlayStation 5, pero no puedo evitar sentirme decepcionado por el hecho de que Nintendo no haya hecho un mayor esfuerzo en este sentido.

La mayoría de las comparaciones entre la Switch OLED y la Switch original se detienen ahí, ya que las mayores mejoras están en la propia Switch. Por supuesto, el dock de la Switch OLED es ligeramente diferente. Donde antes estaba la conexión USB en la parte trasera del dock ahora hay un puerto ethernet. Está bien poder jugar a Smash Bros. Ultimate o Splatoon 2 con una conexión a internet por cable sin tener que comprar un adaptador, pero es francamente vergonzoso que esta función no se incluyera en el dock original. Sigue habiendo dos puertos USB en el lateral del dock que viene con la Switch OLED, pero también significa que te quedas sin un puerto USB. Aun así, me parece que el cambio merece la pena, y es mucho más probable que juegue al multijugador online ahora que antes, a pesar de que las funciones de comunicación de Nintendo Switch Online siguen siendo tan rudimentarias.

La posibilidad de prescindir de la conexión inalámbrica con la Switch OLED es estupenda por otra razón, aunque tiene que ver con otra de las deficiencias de Nintendo: la transferencia de tus partidas guardadas y el intercambio de juegos. Mollie trató este proceso con bastante detalle en su análisis de la Switch Lite, así que no repetiré cada palabra, pero sus quejas al respecto siguen vigentes. Si vas a adquirir la Switch OLED como segunda Switch y quieres transferir todos tus datos de guardado, tendrás que seleccionar manualmente qué datos de guardado quieres transferir, incluso si tienes acceso a la nube a través de Switch Online (que, por supuesto, tienes que pagar). Conectarse a Internet por medio de una red Ethernet significa que los datos guardados se transfieren casi instantáneamente, pero sigue siendo molesto.

Si no tienes Switch Online, tendrás que transferir entre ambas consolas de todos modos, y este proceso puede ser dolorosamente lento, especialmente si tienes muchos datos que transferir. Además, no puedes arrancar los juegos digitales en una Switch secundaria sin conexión a Internet, lo que significa que comprar una Switch OLED y dar tu vieja Switch a tus hijos o a tu pareja requerirá que al menos una de esas Switch esté conectada a Internet en todo momento. Es motivo suficiente para volver a comprar copias físicas para los hogares con dos Switch. Al menos la Switch y la Switch OLED tienen las mismas dimensiones, así que no tendrás que comprar una nueva funda de transporte.

Si bien puedo tener quejas por cómo Nintendo trata a su base de usuarios, realmente no tengo muchas quejas por la Switch OLED en sí. Sé que dije que no iba a hacer esto, pero: Si aún no tienes una Switch, me parece que merece la pena desembolsar 50 dólares más por una experiencia portátil mucho mejor y un puerto ethernet. Sin embargo, si ya tienes una Switch, no puedo asegurar que merezca la pena comprar otra solo por la pantalla OLED y un mejor soporte. Tendrás que tomar esa decisión por ti mismo.