El nuevo Venom de Marvel combina un antihéroe infernal de los 90, el dios más extraño de DC y... ¿Batman?

ADVERTENCIA: Lo siguiente contiene spoilers de Venom #35, de Donny Cates, Phillip Kennedy Johnson, Ryan Stegman, Kev Walker, Danilo S. Beyruth, Ron Lim, Guiu Vilanova, Gerardo Sandoval, Mark Bagley, JP Mayer, Jay Leisten, Scott Hanna, Victor Nava, John Dell, Frank Martin, Chris O'Halloran, Jim Campbell, Matt Milla, Alex Sinclair, Chris Sotomayor, Richard Isanove y Clayton Cowles de VC, ya a la venta.

Venom ha alcanzado un hito como libro y como personaje con la conclusión de la trama del Rey de Negro. Este conflicto cósmico dejó al Universo Marvel con un statu quo muy diferente para los simbiontes y para Eddie Brock en particular. Ahora más que nunca, Venom es un verdadero héroe oscuro que ha salido de la sombra de Spider-Man y ha tejido su propia telaraña.

El final de la carrera de Donny Cates con el personaje se despide evocando otras tres franquicias de superhéroes que no tienen nada que ver. Así es como la relación entre el Rey Veneno cósmico y su hijo evoca al Doctor Manhattan, Spawn y Batman Beyond.

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A lo largo del número, Eddie Brock reflexiona sobre su nueva escala de poder, mucho mayor, que le da acceso e interacción con todos los simbiontes del cosmos. Mientras interactúa con el trono de Knull en su casa, Eddie ve las acciones de un simbionte que lucha junto a los Vengadores, así como uno que ayuda a defender el hogar de Thor, Asgard.

Reflexiona sobre cómo el pasado, el presente y sobre todo el futuro son vistos al mismo tiempo por él, lo que le hace cada vez más difícil centrarse en el aquí y el ahora. Esto se muestra especialmente bien cuando habla con Spider-Man, que apenas puede mantener la atención de su amigo. Esta caracterización cósmica recuerda mucho al Doctor Manhattan de Watchmen, cuyo poder le hacía perder de vista su humanidad al ver el tiempo y el espacio de la misma manera que un mortal vería la suciedad del suelo. Esto cambia radicalmente a Eddie como personaje, y eleva a Venom del mero villano de Spiderman que era antes.

Al final del número, el hijo de Eddie, Dylan, se combina con el simbionte para convertirse en una versión particularmente grande y robusta de Venom. Esto ocurre después de que el villano de Spider-Man Jack-o-Lantern le dispare, sin intención de herirle. Jack es brutalizado por el enorme nuevo Venom, que es incluso más corpulento que su antiguo padre culturista.

Este cuerpo de Venom no sólo es una versión más grande del diseño clásico de Venom, sino que también está adornado con cadenas alrededor de la parte inferior de sus brazos. Dylan señala que este diseño "tan chulo" se basa en los cómics que leyó durante su infancia, lo que parece recordar al Spawn de Todd McFarlane. El personaje titular tenía un diseño muy similar al de Venom, que a su vez también fue diseñado por McFarlane. El engendro infernal era conocido por sus cadenas y su diseño vanguardista, que fue la culminación de esos elementos en los simbiontes de Marvel. Esto cierra el círculo visual de Venom, con el hijo convirtiéndose en el padre en más de un sentido.

La nueva dinámica y el statu quo al final del número es esencialmente la versión de Venom de Batman Beyond. Eddie es visualmente mucho más viejo ahora después de los acontecimientos de King in Black, y su papel como una especie de vigilante entre los simbiontes es similar a la versión de anciano supervisor de Bruce Wayne en Beyond.

En esa serie, Bruce era el mentor de Terry McGinnis, que actuaba como el nuevo Batman. Del mismo modo, Dylan parece estar preparado para ser el nuevo Venom "con los pies en la tierra", mientras Eddie ejerce de mentor de su hijo. Es probable que en futuros números Eddie controle a Dylan con sus nuevos poderes, advirtiéndole de que no cometa errores de novato y siendo una voz útil en su cabeza. Todo esto demuestra lo lejos que han llegado Venom y Eddie, con el antes mezquino Protector Letal convertido en un verdadero héroe con un legado que lo respalda.