Cómo la Crisis Final de DC convirtió a un aliado de Superman en el nuevo Darkseid

Con aliados como la intrépida reportera Lois Lane o el compañero de Superman Jimmy Olsen, el Hombre de Acero cuenta con algunos de los personajes secundarios más populares del Universo DC. Desde el Daily Planet hasta la Unidad de Crímenes Especiales de Metrópolis, a Superman no le faltan aliados a los que recurrir cuando necesita una mano. Pero durante la Crisis Final de Grant Morrison, J.G. Jones y Doug Mahnke, uno de los aliados más leales de Superman se convirtió en uno de sus peores enemigos cuando el detective Dan Turpin se convirtió en el anfitrión humano del Señor de Apokolips.

Dan "Terrible" Turpin era un destacado policía de la Unidad de Crímenes Especiales de Metrópolis. Trabajando estrechamente con su compañera Maggie Sawyer, Turpin fue un detective duro y leal aliado del Hombre de Acero durante años. Apareció por primera vez en una historia corta de Jack Kirby y Joe Simon en el número 64 de Detective Comics, pero no apareció con su propio nombre hasta el número 5 de New Gods, de Jack Kirby y Mike Royer.

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Criado en Brooklyn, Turpin creció en el papel de detective en Metrópolis. Su primer encuentro con el Cuarto Mundo se produjo cuando sus investigaciones le llevaron a ayudar al hijo de Darkseid, Orión, contra su hermanastro Kalibak. Tras ascender a Teniente Inspector de Crímenes Especiales, Turpin pasó un tiempo en Hawái lidiando con los Nuevos Dioses una vez más en Superboy, de Karl Kessel, Tom Grummet y Doug Hazelwood.

Darkseid: Cómo el nuevo dios más oscuro de DC alcanzó su forma final

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Al principio de Final Crisis, Turpin se encuentra con el moribundo Orión, asesinado por una bala disparada en el futuro a través del pasado. Antes de morir, Orión le dice a Turpin que Darkseid está en todos ellos, y le amonesta a luchar hasta su último aliento.

Mientras Turpin investiga las desapariciones de varios niños, Renee Montoya, en su papel de Question, señala al detective el Club del Lado Oscuro. Allí encuentra a los niños en las garras del Jefe Lado Oscuro, la apariencia humana de Darkseid. Sometidos a su dominio por la Ecuación Antivida, los niños se vuelven contra Turpin, sometiéndolo para su amo. El detective escapa de algún modo sin recordar cómo lo ha hecho y se mantiene tras la pista de los niños. Siguiendo la pista e interrogando al Sombrerero Loco, Turpin golpea brutalmente al villano por la localización de los niños hasta que le señala las ruinas de Bludhaven.

En la desolación, Turpin investiga un búnker mientras es guiado por Glorioso Godfrey, el portavoz de Darkseid. El búnker resulta ser la base oculta de las operaciones de los malvados Nuevos Dioses, una llamada Fábrica del Mal donde llevan a cabo sus experimentos con decenas de sujetos involuntarios, entre ellos Batman. Al ver tal horror, Turpin se ve abrumado por otra voz en su cabeza, y se revela que se ha convertido en el nuevo cuerpo anfitrión de Darkseid tras la muerte de Boss Dark Side. Mientras Turpin lucha por el control de sí mismo, su voluntad se rompe, dando al Dios de Apokolips el control total.

El mundo se sume en el caos con el descenso de Turpin, y la Ecuación Antivida se extiende por todas partes, subyugando a gran parte de la población de la Tierra, incluidos sus héroes. Utilizando a Turpin, Darkseid lanza ataques sin cuartel contra los focos de resistencia que quedan, utilizando la Ecuación para manipular directamente y trabajar a través de los tres mil millones de humanos bajo su control. Un Batman desesperado consigue escapar de su confinamiento, disparando a Darkseid con la misma bala que mató a Orión e hiriendo mortalmente al Señor de Apokolips, pero no antes de que el villano utilice su Efecto Omega para enviar al Cruzado con Capa hacia atrás en el tiempo.

Finalmente se enfrenta a Superman, que duda al ver que su antiguo aliado Turpin es el nuevo huésped de Darkseid, sabiendo que un enfrentamiento físico con el monstruo haría más daño a Turpin y a los demás infectados que al propio Darkseid. Mientras Superman vacila, Darkseid dispara la bala que mató a Orión a través del tiempo, completando el ciclo y comenzándolo de nuevo simultáneamente.

Turpin se libera finalmente de la esclavitud de Darkseid cuando los Flashes -Wally West y un Barry Allen recién regresado- llevan al Corredor Negro hasta él. Cuando el disparo de Batman da en el blanco, la parca de otro mundo se cobra a Darkseid, dejando a un Turpin herido pero purificado para que sea testigo del horror que ha provocado sin querer.

Aunque Dan Turpin sea un personaje menos conocido, no sólo fue uno de los aliados más firmes de Superman, sino también una de las mayores amenazas de DC. Aunque no es el primer héroe en ser poseído por una fuerza maligna, fue sin duda uno de los más peligrosos.