[CRÓNICA + GALERÍA] DCode Fest, sábado 15 de septiembre: Django Django, Lüger, The Killers y más

15 DE SEPTIEMBRE @ UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID

 

 

La sesión musical del sábado empezó con el grupo que más ganas teníamos de ver sobre un escenario este verano. Django Django venían a presentar su álbum debut, homónimo. Con el Sol todavía dando guerra, los pobres escoceses comenzaron, paradójicamente, un poco fríos, con un sonido bastante caótico. Hail Bop, tema que abrió el concierto no sonó todo lo bien que merecía. Aun así, remontaron asombrosamente a lo largo de los 50 escasos minutos que estuvieron sobre el escenario, y para cuando tocaron las fantástica Life’s a beach, una oda a la música surf, se habían camelado al público, cuya inmensa mayoría tardaría en comprender qué narices estaba viendo.

Así, la audiencia estaba compuesta, en su mayoría, por fans de The Killers y, por extensión, de The Kooks y Supersubmarina. De ahí la cara de incomprensión de la mayoría de los que tuvieron valor  para ver al grupazo kraut madrileño Lüger. Mientras sonaban temas como Monkeys Everywhere o Swastika Sweetheart, la gran mayoría permanecía estática, atenta, y de vez en cuando miraba al grupúsculo de al lado a ver cómo estaba reaccionando, por si eran los únicos extrañados. Pero para los que sabían qué iban a ver, quedaron satisfechos, ya que metieron la tralla habitual, a pesar del par de problemas técnicos que sufrieron en el escenario.  

Django Django. Foto: Jorge Montoro Cano.

 

De Supersubmarina vamos a hablar poco. Aunque, todo hay que decirlo, es admirable la cantidad de público que reúnen los jienenses, teniendo en cuenta que hace un par de años pocos sabían de su existencia, hicieron un show predecible y para fans, que coreaban los temas extasiados. De temas más oscuros como Bichos del S.XXI, uno de los mejores temas de su álbum debut, en su último álbum, ‘Santacruz’, pecan de lights y masticables, como casi todo lo que transciende del underground hoy en día, por desgracia. Pero bueno, enhorabuena a los chicos, porque triunfar en los tiempos que corren está fastidiado.

 

Siguiendo con los grupos para fans, The Kooks siguen disfrutando de esa fórmula mágica de pop hedonista y sin pretensiones que tanto gustó en su álbum debut. Hitazos como Naive o She moves in her own way fueron acompañados con ansia por los asistentes, cuya proporción por sexos era, aproximadamente, de un chico por cada tres chicas. Eso sí, su último LP, 'Junk of the heart' (2011), quitando el primer single, Is it me, no tiene demasiado tirón. Será porque se han alejado de esa fórmula, intentando sin éxito acercarse al rock.

The Kooks. Foto: Jorge Montoro Cano.

 

Y ya, con un breve intervalo para halagar a Capital Cities, otro de esos grupos relativamente desconocidos, rollo The Shoes, que montaron un fiestón considerable en el escenario Heineken con temas como Safe and sound, vamos a The Killers, el mayor reclamo de la noche, que consiguió reunir a más de 20.000 personas en la Complutense de Madrid.

No voy a mentir, yo esperaba escuchar temas de 'Battle Born'. Vale que era obvio que se iban a dedicar a hacer un concierto de festival, pero una es así de optimista a veces. El caso es que, más allá de tocar Runaways, el primer single de su nuevo disco, como apertura del concierto y aventurarse con Miss Atomic Bomb, una balada que ya habíamos escuchado previamente, el resto del setlist fueron una serie de hits y canciones que se prestaban a la épica fácil, como For Reasons Unknow.

Eso sí, los fans disfrutaron de lo lindo, sin cabida a la decepción que podrían haber causado los nuevos temas, y saltaron y gritaron hasta quedarse sin voz al ritmo de canciones como Spaceman, la denostada Human o Mr. Brighside. También dejaron caer un par de versiones, el Shadowplay de Joy Division que ya lanzaron en ‘Sawdust’ y, de una manera bastante gratuita, Forever Young de Alphaville. Y ya, para rematar, cayó When you were Young, el himno indiscutible, en los bises. Y todos contentos. 

Es una pena que un grupo que, en sus comienzos, tenía canciones realmente buenas como Jenny was a friend of mine o Uncle Johnny, y que está inspirado por gente como Lou Reed o David Bowie se haya despojado de todo atisbo glam u oscuro para acabar siendo un grupo de estadio cantando ñoñadas como la copa de un pino. Qué le vamos a hacer. Aun así, 'chapeau' por Mr. Flowers, que tiene un vozarrón impresionante.

Más fotos en la galería y, en alta resolución, en el Flickr de nuestro compañero Jorge Montoro Cano. No es que no quisiéramos hacerles fotos a The Killers, es que el 'management' se empeñó en que no pasáramos al foso, son así de exquisitos, de ahí que se vean desde el quinto pino.

 

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