10 implicaciones más oscuras en Attack On Titan

Attack On Titan es un gigante del shonen que ha superado con creces las expectativas de la comunidad del anime. Su amplia fama es el resultado de muchas cosas que hace mejor que otros animes. Attack On Titan tiene un tono oscuro, por lo que es más adecuado para el público adulto.

En un mundo de monstruos humanoides devoradores de hombres, los héroes deben hacer todo lo posible para detener la carnicería que parece haber mermado la población humana. En varias ocasiones en Attack On Titan, las decisiones de los personajes tenían implicaciones realmente oscuras, y o bien hacían crecer a los personajes, o bien suponían su inminente perdición.

Es sabido que, en muchas historias de fantasía, una persona tenía que comer algo para obtener poder. Sin embargo, en Ataque a los Titanes, los humanos que se habían convertido en Titanes puros tenían que comerse a un ser humano que poseyera el poder de uno de los nueve. Al hacerlo, obtenían el poder de esa persona y podían entrar y salir de su forma de Titán a voluntad.

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Es una forma muy dura de pasar el poder de una persona a otra. Cada vez que se elegía a una nueva persona para heredar uno de los Nueve Titanes, solía hacerse como una ceremonia, en la que el actual portador se dejaba consumir para transmitir sus poderes a su sucesor.

En un mundo lleno de estos monstruos devoradores de hombres, la lógica dicta que el lugar más seguro para estar es dentro de los confines de las murallas. Salir al exterior era básicamente una sentencia de muerte, ya que los titanes deambulan devorando a cualquier humano al que le pongan las manos encima. Había que ser valiente, tonto o ambas cosas para unirse a los exploradores.

El mundo ve a la isla de Paradis como una mancha en el planeta, y pretenden eliminarla. Por otro lado, los habitantes de Paradis sólo quieren llevar una vida pacífica y normal. Eren llegó ingenuamente a la conclusión de que la paz sólo llegaría exterminando al resto de la humanidad. Ni un solo hombre, mujer o niño se salvaría.

En el pasado, Eldia cometió crímenes indecibles contra la humanidad. Fueron expulsados a la Isla Paradis y sufrieron el azote de los Titanes durante muchos años. Eren espera poner fin a esto, pero matar a gente inocente sólo hará más daño que bien.

Los descendientes de Ymir eran vistos como seres contaminados y no eran tratados como humanos. En el reino de Marley, vivían en un espacio controlado y tenían prohibido salir. Si entraban en la ciudad, necesitaban permisos y debían llevar un brazalete que indicaba que eran eldianos.

Los eldianos fueron utilizados como armas en las guerras de Marley debido a su capacidad de convertirse en titanes. Los eldianos de Marley acabaron siendo criados para ver a sus compañeros de la isla Paradis como demonios, y ahora se encuentran justo en el camino de la furia de Eren.

Por haber abierto una brecha en las murallas interiores y exteriores del distrito de Shiganshina, Reiner y Bertholdt son, implícitamente, culpables de las numerosas vidas que perdieron los titanes. La operación para retomar el Muro de María no habría tenido lugar si ellos no hubieran aparecido, y Erwin no habría muerto en la batalla.

Romper el muro puso en marcha numerosas cosas, y todos los acontecimientos que empujaron a Eren hacia el lado oscuro pueden remontarse a este acto singular. Los habitantes de Paradis creían que eran los últimos de la humanidad, y gracias a Reiner y Bertholdt, Eren está a punto de hacer realidad lo que antes era una falsa suposición.

El antiguo rey de Eldia se refugió en la Isla del Paraíso y, con el poder del Titán Fundador, levantó muros formados por millones de Titanes Colosales. Juró renunciar a la guerra, y cualquiera que herede su poder está obligado a ello.

Este voto ha hecho que los eldenses de la isla Paradis sufran por los crímenes de sus antepasados. Llegó incluso a librar a la gente de sus recuerdos del mundo fuera de las murallas, por lo que la gente ni siquiera sabía por qué estaba sufriendo. Vivieron durante años creyendo que eran lo que quedaba de los humanos en un mundo plagado de Titanes.

El líquido cefalorraquídeo de Zeke ha sido la causa de la caída de naciones en el pasado. Infundía vino de alta calidad con su líquido cefalorraquídeo y se lo servía a los funcionarios de alto rango. Una vez ingerido, todos están a merced de Zeke.

Con un solo grito, Zeke puede convertir a todos los eldenses que hayan ingerido su líquido cefalorraquídeo en puros titanes que causarán mucho caos y harán caer a una nación en un solo día. Lo ha utilizado varias veces y el efecto ha sido devastador. Las diversas habilidades de Zeke le han valido el apodo de "Chico Maravilla".

Con el poder del Titán Fundador, el Rey de las murallas podría hacer cualquier cantidad de cosas. Tendría el control total de todos los súbditos de Ymir, y podrían comandar a los Titanes en masa. Eren ya tenía el poder del Titán Fundador, pero no podía utilizarlo porque carecía de sangre real.

Eren tuvo que entrar en contacto con alguien que tuviera sangre real para poder activar el poder del Titán Fundador. Al entrar en contacto con Zeke, Eren activó este poder y comenzó a utilizarlo para asolar el mundo con millones de Titanes Colosales, pisoteando todo a su paso.

El control del Fundador sobre los súbditos de Ymir es absoluto. Por ello, todo aquel que herede uno de los Nueve Titanes estará sujeto a la maldición de Ymir. Según la maldición, el heredero debía vivir sólo 13 años después de adquirir el poder.

Cuando su tiempo está a punto de terminar, se ofrecen a una persona elegida para sucederles. El sucesor potencial se convierte en un Titán puro y devora al portador, obteniendo su poder. Este ciclo ha continuado durante generaciones, y Eren espera detenerlo.