8 hilos argumentales que Matrix 4 aún debe resolver

Hay pocas películas tan rompedoras como la obra maestra en tres partes de los Wachowski: su revolucionario CGI y sus fenomenales secuencias de acción coreografiadas ayudaron a renovar el género ciberpunk en el contexto del cine de masas.

A pesar de profundizar en la filosofía y la metafísica, Matrix no logró resolver adecuadamente las docenas de líneas argumentales que se abrieron a lo largo de la trilogía. Aunque dejar hilos sin atar no es tan raro, a Matrix se le ha dado una rara oportunidad de desenredar su complicada red en forma de una cuarta película, Resurrecciones.

Los humanos, naturalmente, trataron de subyugar a sus creaciones, negándose a tratar a las conciencias de las I.A. con los mismos derechos (o incluso con la cortesía básica). Tras acalorados conflictos, las Máquinas optaron por crear una nación para sí mismas, Cero Uno, que era tan poderosa que los líderes mundiales decidieron bombardearla por miedo.

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El plan fue un fracaso masivo, y condujo a la aniquilación del mundo tras la Operación Tormenta Oscura: al impedir el acceso a la luz solar, los ecosistemas se colapsaron, llevándose la agricultura y todo lo demás. Lo que no tiene sentido es que las Máquinas deberían haber sido capaces de arreglar el problema de la luz solar con facilidad, o al menos, dejar atrás el planeta destruido. Las resurrecciones de Matrix pueden tener una respuesta.

Neo es la sexta encarnación del Programa Prime, una característica codificada de forma innata en la Matriz que ayuda a recoger y consolidar las conciencias humanas consideradas como "anomalías". Esto significa, obviamente, que todo el proceso se ha repetido seis veces antes, con seis Uno que han emprendido el mismo viaje de descubrimiento que Neo.

La única diferencia es que los predecesores de Neo aceptan la explicación del Arquitecto y la inevitable destrucción y restablecimiento de Zion. No se sabe casi nada de estas entidades, lo que da a Matrix 4 la oportunidad perfecta para dar cuerpo a algunas historias relevantes.

La Matriz y las Máquinas que la crearon se alimentan supuestamente de la energía generada por los humanos, una combinación de energía térmica y eléctrica que es parte esencial de la dieta de las Máquinas, por así decirlo. Casi todos los humanos de la Tierra en los últimos cientos de años han nacido en una cápsula, donde pasan toda su vida conectados a través de los circuitos neuronales de la Matriz, entregando inconscientemente su bioelectricidad hasta que mueren y son reciclados.

Sin embargo, los humanos no necesitan mantenerse conscientes en ningún estado si su único propósito es producir energía, lo que sugiere que la Matriz tiene un papel más importante que el que a primera vista se puede apreciar. Las resurrecciones de Matrix bien podrían arrojar algo de luz sobre por qué es necesario el sistema en primer lugar.

Zion tiene una población considerable, con más de un cuarto de millón de personas, pero obviamente palidece en comparación con los miles de millones de bluepills que siguen atrapados en Matrix. La Resistencia lleva mucho tiempo luchando por su libertad, y sus plegarias son atendidas cuando Neo se presenta ante ellos como el Elegido.

Sin que los sionistas lo sepan, la verdadera responsabilidad del Elegido consiste en mantener la integridad estructural de la propia Matriz, un secreto que las Máquinas les ocultan intencionadamente. Sin embargo, dado que se espera que el Elegido seleccione a 16 supervivientes de la iteración anterior de Sion, parece probable que las generaciones futuras conozcan su destino. Este no es el caso en la trilogía, pero es un terreno fértil para que la secuela siembre nuevas narrativas.

Hasta su primera muerte en Matrix, Neo es incapaz de demostrar que es realmente El Elegido. Sin embargo, después de que el agente Smith lo mate, Neo despierta con una increíble serie de poderes, como la telequinesis, la velocidad hipersónica, el aumento de la fuerza y la durabilidad, el vuelo, etc. De hecho, se muestra tan poderoso que su mera existencia puede distorsionar la realidad de Matrix, pero estas habilidades se esperan de El Elegido.

Por desgracia, Smith (en el cuerpo de Bane) consigue dejar ciego a Neo, en la vida real, donde se supone que no tiene ningún tipo de poder especial. Y, sin embargo, puede percibir de algún modo su entorno en forma de ondas de luz doradas. La mecánica de la línea directa de Neo con la Fuente exige una mayor extrapolación.

El Arquitecto afirma que han pasado seis siglos desde la Guerra de las Máquinas, lo que significa que la película se sitúa en torno a 2699. También menciona que los humanos fueron originalmente "esclavizados" por las Máquinas, obligándoles a generar energía sin ofrecerles una vía de escape mental. Como resultado, nació la primera Matrix, "una obra de arte impecable, sublime", pero resultó ser un "fracaso monumental".

La segunda versión, conocida como la Matriz de las pesadillas, también se derrumbó porque no podía replicar las necesidades de la psique humana. Finalmente, fue el Oráculo quien resolvió la crisis creando un sistema con la ilusión de la elección. Es interesante considerar estas versiones anteriores de Matrix, no sólo en el contexto de la Matrix de Neo, sino la que él crea con su sacrificio.

Neo se rebela contra las Máquinas y pide a los Deus Ex Machina que perdonen al pueblo de Zion a cambio del agente Smith. No sobrevive al proceso, o eso es lo que parece cuando su "cadáver" es bajado suave y respetuosamente al suelo. Sin embargo, cuando Sati pregunta a la Pitonisa si Neo volverá alguna vez, ésta ofrece una respuesta ambigua, rayana en lo positivo.

Matrix Resurrections tiene como protagonista a una versión más antigua de Neo, pero ni siquiera las pistas presentes en el tráiler satisfacen del todo la curiosidad de los fans. ¿Es este Neo el mismo de antes? ¿Es un humano, un programa o un fallo más en Matrix? Es de esperar que la próxima película sea capaz de resolver este enigma tan básico.